Cada curso que preparamos es todo un viaje, una exploración primero personal, adentrándonos en el corazón de la Enseñanza para poder transmitirla desde su esencia, desde lo que percibimos es lo más puro, al menos lo intentamos. Este curso no es un mero curso de cómo utilizar el péndulo, su mecánica sino que es un curso de crecimiento espiritual profundo. Nos ofrecerá herramientas para caminar durante toda nuestra vida como «esenios», caminantes de la Verdad, actualizando el ser original tal y como fue ideado por la Fuente en su origen. Eso es ser un esenio.
Para crear este curso hay horas de introspección, de inmersión vibratoria en la enseñanza. Hay una magia, una alquimia interna que ha de producirse en el transmisor del mensaje, de la enseñanza. Un encuentro consigo mismo, con sus profundidades, a veces con sus sombras y sus luces.
Así como sucedió con el Curso del Péndulo de los Arcángeles, este curso promete. No son promesas de éxito en términos de cantidad de alumnos, sino en riqueza de la transmisión. Nuestros cursos no son meras palabras, buscamos transmitir vibratoriamente la esencia de la enseñanza y como buenos hilanderos, hemos primero de tejer el tapiz que formará parte de la transmisión…
Tejiendo estamos!
Bendiciones
